Nos importa que nuestros chicos sepan mucho, porque tienen que estar listos para enfrentar la sociedad del conocimiento, para poder entrar en el mundo del trabajo, para poder desenvolverse en la vida, pero si esos conocimientos no están acompañados de un formación en valores, de una formación ética, de una formación para una ciudadanía activa no podemos hablar de una educación de calidad.
La practica de la ciudadanía exige pasar de la normativa a la practica, y no solo al ejercicio del debate y el dialogo, sino también de otras competencias que exigen "salir a la cancha" de la comunidad, y embarrarse los pies, las manos y el corazón en la transformación de la realidad.
En la medida en que avanzamos hacia una concepción de ciudadanía activa, pensamos en el aprendizaje-servicio como una modalidad de la educación para una ciudadanía activa.
Muy pronto comenzamos a trabajar en los proyectos que estamos preparando para este año... qué buena noticia manos en acción.
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